Andalucía es una región llena de maravillas ocultas que van más allá de las grandes ciudades. En esta tierra de contrastes, los pequeños pueblos con encanto ofrecen una visión auténtica de la cultura y la historia andaluzas. Desde Alvecor te invitamos a descubrir cinco destinos encantadores en Andalucía que no puedes dejar de visitar.
Frigiliana: El Pueblo Blanco de la Axarquía
Frigiliana, situado en la comarca de la Axarquía en Málaga, es conocido por sus casas encaladas y calles empedradas adornadas con flores coloridas. Pasea por el casco antiguo, visita el Palacio de los Condes y disfruta de las vistas panorámicas desde el Mirador de Santo Cristo. Además, recomendamos probar la miel de caña, un producto local delicioso.
Setenil de las Bodegas: Casas en las Rocas
Setenil de las Bodegas, en la provincia de Cádiz, es famoso por sus casas construidas en las rocas. Las calles Cuevas del Sol y Cuevas de la Sombra son únicas, con casas incrustadas en las formaciones rocosas. Explora sus bares y restaurantes ubicados en cuevas naturales y disfruta de una experiencia gastronómica única. Es obligatorio visitar la Torre del Homenaje para obtener una vista panorámica del pueblo.
Zuheros: Belleza y Historia en la Subbética
Zuheros, en la provincia de Córdoba, es un pintoresco pueblo blanco rodeado de paisajes naturales impresionantes. Visita el Castillo de Zuheros y el Museo de Costumbres y Artes Populares para conocer la historia local. La Cueva de los Murciélagos es una atracción imprescindible para los amantes de la naturaleza y la espeleología.
Vejer de la Frontera: Encanto y Tradición
Vejer de la Frontera, en la provincia de Cádiz, es un hermoso pueblo encaramado en una colina. Sus calles estrechas y empedradas, junto con las casas encaladas, crean un ambiente encantador. Explora la Plaza de España con su fuente decorativa y visita el Castillo de Vejer.
Pampaneira: Corazón de la Alpujarra
Pampaneira, en la provincia de Granada, es uno de los pueblos más pintorescos de la Alpujarra. Sus calles empinadas y estrechas, adornadas con flores y acequias, invitan a un paseo relajado. Visita la iglesia de Santa Cruz y el Taller de Jarapas Hilacar para ver cómo se fabrican las tradicionales alfombras alpujarreñas.